La Capoeira

como arte, en cuanto a forma de expresión corporal, posee un lenguaje en que cada gesto significa y representa ideas y sentimientos. Emociones. Sensaciones.

 
En ésta, el balanceo de los brazos, la amenaza de los pies, el meneo del tronco…no pierden continuidad. Un deambular en continua relación con el suelo. La capoeira es una danza donde el empleo de movimientos arriesgados envuelve a todos los participantes y contagia a quien la asiste. Pero además, su significado va más allá, "el contacto con el suelo, evoca el intenso vínculo de los hijos con la madre. Envolviendo, protegiendo, creando vida y ayudando a todos, silenciosa".
Es lucha negra. Con fuerza ritual, que preserva mitos. Participando activamente en contra de todo tipo de fuerza de dominación…en defensa de la identidad colectiva, es instrumento de transformaciones.
Porque el punto culminante en que surgió fue el de ofrecer la resistencia necesaria contra la discriminación del poder que oprimía y se diafrazaba al hacerlo. Por eso no es legítimo convertirla en deporte o folklore conforme se desea, ni se pueden aceptar en ella cosas que le son ajenas, como el imponerle unas reglas…
La capoeira es la lucha negra presente en lo cotidiano de Brasil: en los terreiros, en los morros, en las chabolas, las calles y plazas. Compañera de trabajo y diversión al tiempo, acompañando en cualquier ambiente social donde se incluye al negro.

Estilos - La Capoeria es solo una

Todos somos capaces de reconocer un juego de capoeira por el conjunto de movimientos, por el ritmo, la melodía. A pesar ser un proceso individual, multifacético y dotado de características marcantes que le confieren individualidad propia e inconfundible.
Cada capoeirista, pues, representa un "nuevo estilo", lo que se comprende fácilmente al decir que es una actividad motora que exterioriza la individualidad misma del practicante, en toda su complejidad neuro-psicosocial…cada uno exhibe su certificado de identidad en el conjunto de movimientos y los detalles propios de cada uno de estos. Según Mestre Bimba: "Cada uno tiene su estilo, de dar los golpes; de llevar a cabo los movimientos", y a la pregunta del juego de alguien decía: "es su estilo…si le quitases ese defecto parecería otro".
La misma capoeira por ser un modo de vida, una filosofía o manera de ser, incluida en un ambiente social, por existir en un determinado momento histórico, recibe influencias socio-político-culturales modificando su ambiente a su vez en un proceso dialéctico continuo. Así, no es la misma la capoeira de hoy a la del pasado, ni lo será la del futuro igual a ésta…siempre será diferente. Es un proceso de evolución modificable por momentos, de modo similar que si observamos a un determinado capoeirista a lo largo de su vida y vemos variaciones en su conducta, en su filosofía, en sus movimientos… aunque no pierde su personalidad! Con esto, se puede concluir diciendo que cada mestre por ser una personalidad especial dotada de identidad propia crea un estilo que transmite a sus descendientes hasta que las influencias del ambiente sobre estos hacen particulares sus detalles…Y es que a pesar de sus grandes hombres, la humanidad (cada persona en concreto) tiene su propia trayectoria a cada instante vivido, y lo que incluimos en nuestra conducta son elementos de todos los que nos preceden en largo camino que la historia posee. No por ello existe una pérdida de autenticidad.

Historia y Oralidad

El significado de la palabra en lengua tupí (Kapu´era) es "clareia"(claro en la mata). Término que está relacionado con el lugar de la mata que se despejaba de matojos para el cultivo agrícola. Tras la colecta nacía un matorral, lugar donde era practicada la capoeira.
Algunos historiadores afirman que la palabra es de origen tupí-guaraní (caa-pua-neira), nombre de una planta rastrera de la región interior, que hace alusión a la lucha del capoeirista.
El significado de la palabra cambia dependiendo de la región donde es practicada, siendo que en algunos casos se asocia a una especie de cesto (jaula) que sirve para cargar animales domésticos o víveres.
Lo importante es que en todo lugar donde es practicada, la capoeira es considerada juego atlético, sistema de ataque y defensa.

Capoeiras y Alborotadores

La expresión "capoeira" históricamente ha servido para designar a los bribones, a los alborotadores. Desde el siglo XIX al inicio del XX, los capoeiras tuvieron sus hechos ampliamente divulgados por la prensa y la literatura. Aunque se hayan vuelto más famosos los capoeiristas cariocas, las principales ciudades brasileñas de la época: como Recife, Salvador y Sâo Paulo; fueron palco de innumerables confusiones afrontadas por los capoeiristas.
Sólo en 1890 la capoeira adquiere un status diferenciado, frente a los marginales y delincuentes de forma general, desde el punto de vista penal de la legislación brasileña. El código penal de la República de los estados unidos de Brasil por el decreto n° 487 de Octubre de 1890, establecía en su capítulo XIII -de los vagos y capoeiras- : " Artículo 402. Hacer en las calles y plazas públicas ejercicios de agilidad y destreza corporal conocidos por la designación de capoeiragem; andar en desbandadas con armas o instrumentos capaces de producir una lesión corporal, provocando tumulto o desorden, amenazando persona cierta o incierta, o llevando a cabo temor de algún mal: pena de prisión celular de dos a seis meses."
Y la ley fue aplicada con rigor. Las maltas (bandas) eran normales en aquella época, según destaca José Murillo Carvalho: "Tal vez el de los capoeiras haya sido el único sector de la población cuya acción fuese obstaculizada por la República, siendo perseguidos por jefes de policía con posterioridad, y deportados en gran número a las isla de Fernando de Noronha". De hecho, las pandillas de capoeiristas pasaron a ser famosas en Río, por ejemplo, donde destacaron por ser grupos con gran organización y respaldo junto a los líderes políticos de la época (los capoeiristas realizaban trabajos como mercenarios…), siendo su actuación en la política importante por llegar a disolver mítines, hacer de guardaespaldas de políticos, presionando electores…Según J.M.Carvalho serían 20.000 aproximadamente los capoeiras que estaban en Río en vísperas de la República, pudiendo haber desterrado sin proceso a unos 600, Sampaio, conocido jefe de policía.
La misma expresión "capoeiragem" designa algo además del juego corporal, la malicia y la habilidad en el manejo de las armas como navaja, porra y cuchillos.

Ese contingente marginal fue un importante componente de la estructura social en las mayores ciudades brasileñas desde el inicio del siglo XIX. La existencia de esa camada social compuesta por la llamada plebe libre y por los ex-esclavos proporcionó un ambiente favorable a las manifestaciones culturales populares.
Conviene recordar que las camadas tenían una composición bastante heterogénea, envolviendo a inmigrantes…que no conseguían ocupación regular. Aunque predominasen los negros y mulatos, era un gran número de blancos desempleados, así como de extranjeros, el que practicaba la capoeira.
Desde mediados del siglo XIX, no obstante, se observa una continuidad con la forma del juego de la calle y el de las academias bahianas. En Sâo Paulo y Río de Janeiro, por ejemplo, aunque estén muy presentes los símbolos en referencia a la antigua capoeira, los principales grupos actualmente existentes han sido fundados por mestres del nordeste -de Salvador principalmente- en los años 60.
Como en Río de Janeiro, en Salvador, la figura del capoeira era asociada al marginal, aunque el grado de organización en los grupos/bandas, así como su utilización en los Consejos Electorales, haya sido significativamente menor. El capoeira bahiano construyó una fuerte tradición, muy recordada en la actualidad en las cantigas. Se revolvían, eso sí, en las confusiones surgidas en los lugares frecuentados por bandidos, prostitutas y otros delincuentes. Eran constantes las noticias de periódicos que se referían a las peleas en lugares como: Estrada da Liberdade, Rua dos Capitaês, Taboâo, Cais Dourado e Cais do Porto. Según Waldeloir Rego: "El Muelle Dorado, al final del siglo pasado, se volvió famoso por el exceso de crímenes y desordenes que allí tenían lugar, sobretodo por ser zona de prostitución donde convergen, además de los capoeiras, marineros, soldados de policía y delincuentes". De hecho, los viejos mestres recuerdan el Muelle como punto de encuentro y de grandes desafíos entre los capoeiras del pasado.
Las fiestas de Largo, tan comunes en el calendario de Salvador, siempre han sido palco de las exhibiciones de los capoeiristas bahianos. Eventos tradicionales como la Fiesta de la Ribera, la Fiesta de Bonfim, la Fiesta de Conceicâo, Fiesta de Santa Bárbara y Fiesta de Boa Viagem, reunían a capoeiristas en rodas que iban de simple divertimento a peligrosas luchas, en que ocasionalmente aparecían cuchillos y navajas.

Las Rodas

Los capoeiristas forman un círculo de unos 5 metros de diámetro. En la roda destacan los instrumentos musicales: berimbaus, pandeiros, y ocasionalmente, agogo y reco-reco. Los mestres más antiguos son unánimes al condenar la utilización de atabaque (también llamado timbal) en la roda de capoeira. Un viejo mestre de Santo Amaro de la Purificación, ciudad cercana a Salvador, cuenta: "La capoeira antiguamente tenía dos pandeiros, dos berimbaus y un agogô. Hoy en día hay timbal en capoeira. Un timbal, para quien no lo sepa, ya hace que se parezca al Candomblé. Con dos timbales ¿a qué no se parece? Hay academias con dos timbales. El timbal esconde el instrumento".